Tus labios brillan como una metáfora y la arena roza el vestido de la muerte, había sangre de sirenas en tu alma y yo pasé de largo, llegué a la vida de las flores y miré las nubes rotas por la luz.
Yo soy el picaporte del viento ¿qué sois vosotros?
Llorando en tu infierno las nubes se preparan para morir, la lluvia es de arena y barro y puede abrir una rosa como a una vela que hará realidad su brillo.